jueves, 10 de mayo de 2012

Por fin se ha escachao la iglesia de San Miguel de Otal

Por fin ha pasado. Sin testigos que se pudiesen avergonzar, algún día de este mayo o del pasado abril se hundió el techo de la iglesia de San Miguel de Otal, ubicada en el pueblo deshabitado, que no abandonado, del mismo nombre. Ningún pueblo de Aragón está abandonado, ya que siempre alguien los visita, y muchos más se acuerdan de ellos.


Otal, en el municipio de Broto, se quedó sin habitantes en 1970 y alberga un iglesia de estilo mozárabe serrablés del siglo X, que ya en 1982 fue restaurada por la Asociación de Amigos del Serrablo, quienes la salvaron entonces de una muerte segura. Desde entonces muchas son las voces que han reclamado, sin éxito, su restauración
Un conocido arquitecto de Zaragoza, ha redactado un proyecto para su restauración, al igual que se hizo con la cercana ermita de Bergua, en el mismo término municipal de Broto. Pero este proyecto duerme olvidado en el despacho de los rectores políticos encargados del Patrimonio Cultural de Aragón, mientras que  la práctica totalidad del presupuesto de año 2012, novecientos y pico mil euros, se destinan a restaurar el antiguo seminario de San Carlos, utilizado hoy como residencia de sacerdotes jubilados, a iglesias y ermitas, como esta de Otal, con cerca de mil años de antiguedad y un estilo singular, solo les queda el olvido y la esperanza de que ninguna tormenta de verano se cebe especialmente con ellas 
Aunque pienso que dentro de lo malo, el hecho de que solo se haya hundido la cubierta de la iglesia, ahora en primavera y con el verano por delante,  puede ser un acicate para que alguien con un mínimo de sensibilidad decida que ya es hora de restaurar esta emblemática iglesia, de no ser así, no tienen sentido las administraciones y entidades que se dedican a la protección del Patrimonio.

El pueblo de Otal, fotografíado desde el cercano monte Pelopin (2007 mts)

miércoles, 9 de mayo de 2012

Huesca desde el aire (II)


Mar de nubes sobre Caldearenas

Aguero y sus mallos


Los mallos de Riglos


Peregrino cerca de Arrés




Pantano de la Peña. Santa María y la Peña. Triste. El trazado del canfranero a la derecha

Castillo de Loarre


Castillo de Loarre





Tierras de labor cerca de Loarre




La Canal de Berdún

sábado, 5 de mayo de 2012

Huesca desde el aire (IV)

 
Las Tres Sorores. El Cilindro, Monte Perdido y Pico Añisclo o Soum de Ramond. Delante, a la derecha,  la Torre de Goriz. Solo me falta de ascender el Cilindro. Está un poco complicado.



La urbanización Ordesa-Gavarnie, encima del rio Ara. Sobre la carretera, el hotel y camping Ordesa. 


 Valle de Torla. Al  fondo a la izquierda, la entrada a Bujaruelo enfrente de la la entrada a Ordesa




Llegamos a la zona del Sobrepuerto. Abajo el pueblo de Otal. Impresionan los aterrazamientos realizados para poder cultivar el terreno. Otal es una visita obligada para conocer y entender la vida en el Pirineo

Ermita de santa Orosia. Aquí suben en romería las gentes del lugar cada 25 de junio, da igual que sea laborable o festivo, para recordar el hallazgo de las reliquias de la santa. Si no me da pereza igual hago alguna página con las fotos de la romería del año pasado.



 No todo es bonito en el Pirineo. Campos de golf y urbanización "las Margas", cerca de Sabiñanigo. Durante la Guerra Civil, desde el altiplano de Santa Orosia, un cañon republicano bombardeaba periodicamente (cuando tenía munición)  la industria química de Sabiñanigo, con poco éxito. Si estuviese ese cañón hoy día, yo mismo le daría, además, otras coordenadas.

Cerca de Lárrede el piloto me anticipa lo que es el viaje de regreso. Acrobacias y cabriolas a ras de suelo. En este caso las ovejas son testigos de nuestra altura.



Ermita de San Cristobal. Hito del Camino de Santiago, muy cerca ya de Jaca, y en un estado preocupante de conservación

Puente de San Miguel, sobre el río Aragón, en Jaca



Sobran los comentarios


Lo mismo de antes. No se si somos una avioneta o una cosechadora, recogiendo el alfalfe de los campos.
Unos pocos kilómetros  después aterrizamos en el aeródromo de Santa Cilia

Huesca desde el aire (V)

La lluvia siempre me ha acompañado en mis vuelos en helicoptero. Esta vez no iba a ser distinto. Le añade emoción, pero ímpide hacer fotos bonitas


Al poco de despegar. Ibon del Balneario de Panticosa 

Sigue lloviendo.
Llanos de Millaris, encima del barranco de Cotatuero. Al fondo la faja de Pelay, en Ordesa

Tras un estancia en el refugio de Góriz, regresamos pasando al lado de la Brecha de Roldán

Abajo, el puerto de Bujaruelo, paso de contrabandistas y maquis. En el centro de la foto el parquin del collado de Tentes, ya en Francia. Escondido a la izquierda el ibón de Lapazosa 


Con un poco de zoom se aprecia la aglomeración de vehículos franceses en el Col de Tentes


Ibón de Bernatura. Paso natural de las vacas del valle de Broto en su viaje a los pastos de Francia. Cuando subí a pie a este  ibón, el día anterior habían subido  las vacas. Toda la senda era un alfombra blandita.


Rio Ara, antes de entrar en Bujaruelo, debajo del Vignemale

El Vignemale. Sigue lloviendo

Barranco del Escalar